El Estado colombiano obtuvo una victoria legal importante en una disputa con la empresa estadounidense de exploración y producción de hidrocarburos Hupecol. La multinacional había demandado al país por más de 20.000 millones de pesos y cerca de 12 millones de dólares estadounidenses por daños y costos de oportunidad.
La disputa giraba en torno a la revocación de la licencia ambiental de 2016, que otorgaba a Hupecol el derecho de explorar petróleo en La Macarena, cerca de Caño Cristales, considerado uno de los ríos más bellos del mundo. La Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (Anla) anuló la licencia debido a preocupaciones ambientales, especialmente por la proximidad del proyecto a la maravilla natural, un área de especial importancia ecosistémica” entre los departamentos de Meta y Caquetá.
La revocación de la licencia no violó los derechos de la empresa, ya que estas licencias son temporales y sujetas al interés público. Además, recordó a Hupecol la necesidad de cumplir con la normativa colombiana, especialmente en lo que respecta a la protección ambiental. Esta sentencia ratifica que las políticas del Gobierno en materia de protección ambiental y desescalamiento gradual del modelo extractivista son el camino para enfrentar el cambio climático. Los intereses económicos no pueden estar sobre los derechos ambientales.